En Estados Unidos, unos ocho millones de niños reciben servicios de educación especial, pero en los últimos años el Departamento de Educación ha constatado que estos han sido objeto de prácticas disciplinarias inadecuadas.
Para garantizar que la Ley de Educación para Personas con Discapacidades (IDEA) se ejecute correctamente, el Departamento de Educación Nacional ratificó los principios que deben seguir los distritos escolares referentes a la disciplina.
"Es hora de romper el ciclo de la disciplina excluyente", afirmó Valerie C. Williams, directora de la Oficina de Programas de Educación Especial del Departamento de Educación Nacional, al publicar la guía federal de prácticas disciplinarias. "Pedimos a las escuelas y distritos que redoblen sus esfuerzos para hacer cumplir esta ley y revisen sus políticas y procedimientos".
Un estudio reciente del Center for Civil Rights Remedies de UCLA arrojó que entre los estudiantes discapacitados de las escuelas intermedia y secundaria, el 24 % de los niños afroamericanos fueron suspendidos al menos una vez, en comparación con el 11 % de los estudiantes blancos. Solo en el curso 2017-2018, los estudiantes con discapacidad, que apenas representan el 13% de la matrícula escolar, concentraron el 25% de todas las suspensiones.
La Guía envía a las escuelas y distritos escolares un fuerte mensaje para impulsar cambios en la forma de abordar los comportamientos de estudiantes con discapacidades, sin violar su derecho a una educación justa, gratuita y asequible.
Esto es lo que la nueva guía federal pide que hagan los distritos y las escuelas:
1. Una revisión de prácticas disciplinarias y recolección de evidencias
El Departamento de Educación Nacional solicita a los distritos escolares que confirmen si sus acciones contribuyen a perpetuar una disciplina innecesaria y excesiva. La guía señala que las suspensiones y expulsiones influyen en el aumento de las tasas de abandono escolar.
2. Crear ambientes seguros mediante prácticas de intervención positiva
Funcionarios federales destacaron que, en la mayoría de los casos, los estudiantes que no reciben el apoyo establecido por la ley reaccionan en consecuencia y son sancionados injustamente. La guía alienta a las escuelas a hacer todo lo posible para preparar Planes de Educación Individualizados que brinden el apoyo que cada estudiante necesita.
3. Formación del personal docente y administrativo
La investigación federal encontró que los estudiantes con discapacidades son disciplinados con frecuencia por ofensas que son resultado de su discapacidad. La guía enfatiza la necesidad de desarrollar estrategias para educar a maestros y administradores en prácticas de comportamiento positivo.
4. La ley no veta la necesidad de disciplinar a los estudiantes con discapacidades
La Ley no prohíbe que las escuelas disciplinen a los estudiantes con discapacidades. Lo que busca es que las escuelas sean más eficientes en las tareas de prevención y capaces de desafiar el pensamiento convencional a la hora de manejar conductas difíciles.
Aunque la guía no modifica ninguna regla establecida, ha sido elogiada por las autoridades educativas federales como la declaración más completa sobre los derechos civiles de los estudiantes con discapacidades.
Mientras los estudiantes se preparan para regresar a la escuela y los distritos escolares continúan lidiando con los estragos de la pandemia, las recomendaciones federales buscan frenar las prácticas disciplinarias indiscriminadas, como la suspensión excesiva y la expulsión de estudiantes con discapacidades.